lunes, 14 de noviembre de 2016

Hazme la guerra



Ojalá existir para ti,
encontrarnos la una a la otra,
curarnos las heridas con besos,
que no creas, sé bastante de eso,

enredarnos piel contra piel,
seda contra terciopelo,
miedo y anhelo,
tempestad contra calma.


Yo ya no recuerdo lo que es mirar a alguien e implorarle al cielo no quedarme ciega nunca,
yo ya no recuerdo la adrenalina de pronunciar las palabras exactas,
no recuerdo el sentir las cosquillas,

pero sí cómo hacerlas.


Que si tú me dejas,
yo te digo un par de cosas con los ojos,
y el que quiera entender que entienda,

y el que quiera pasar que entre,
pero que no llame, que nunca llame.


Que yo estoy harta de que me pidan permiso,
que quiero tener miedo, vértigo,

que quiero que me conduzcas hasta el kilómetro cero,

que quiero explorar tu cañón del colorado
y por si aún no te has percatado,
te lo pido: aterriza en mi vida.


Esto es una declaración de guerra,
para olvidar los períodos de lo que un día llamamos la paz,

que buena falta nos hace.

No hay comentarios: